Gerald Norton
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Podría decirse que el mayor obstáculo para mejorar el ahorro de combustible no es la tecnología del motor, sino el peso. Con vehículos más livianos, los fabricantes de automóviles pueden usar motores mucho más pequeños para impulsarlos, además de la ventaja adicional de un rendimiento mejorado en todas las demás áreas.
Si bien muchos fabricantes de automóviles se han centrado en el ahorro de peso en componentes estructurales, por ejemplo, utilizando aluminio en lugar de acero para el chasis, Ford ha estado buscando formas de reducir el peso de los componentes internos, como los plásticos en la cabina. Diseñado en el Instituto de Tecnología de Massachussetts (MIT) para Ford es una nueva tecnología MuCell, que reduce drásticamente el peso al infundir burbujas de nitrógeno o carbono en plásticos convencionales.
Según Ford, los plásticos MuCell son un 20% más livianos y, aunque son un poco más débiles, solo son en un grado insignificante, ya que estos componentes están diseñados para ser de 50 a 100 veces más resistentes y más duraderos de lo necesario..
Ford dice que los primeros vehículos que verán el uso de estos plásticos incluyen el C-Max a Mondeo (incluido el Fusion de próxima generación), con plásticos MuCell utilizados para las cubiertas del motor en estos modelos. Ford planea implementar la tecnología mucho más ampliamente para 2020, mientras se esfuerza por alcanzar su objetivo de reducir el peso de sus vehículos de 200 a 750 libras..